A tod@s nos gustan los cachorros: son hermosos, tiernos, nos entusiama la idea de verlos crecer, etc. Precisamente por esta razón tienen muchas más probabilidades de ser adoptados, aunque también de ser maltratados y/o abandonados unos meses después, cuando empiezan a mudar dientes, morder y destruir objetos o muebles, tener más energía y no comportarse exactamente como teníamos pensado.
Por eso, antes de adoptar a un cachorro, hay que pensar seriamente si nuestro estilo de vida como adoptantes realmente concuerda con sus necesidades. O si estamos dispuest@s a cambiarlo para que así sea.
De no ser así, hay adoptar a un perro o gato adulto. Integrar a una masctoa a tu familia aún es posible al adoptar a un peludito adulto, y esta puede ser una de las mejores decisiones que tomes. Te compartimos algunas ventajas de hacerlo:
Sus personalidades ya están desarrolladas
Así como los humanos, los animales también configuran su personalidad conforme crecen, por lo que al adoptar a un perro adulto ya no tendrás que descubrirla sobre la marcha, sino que tendrás muy claros sus comportamientos desde el inicio.
Al adoptar a un perro o gato adulto en Fundación Antonio Haghenbeck te damos un perfil muy completo de su temperamento, nivel de energía y origen; además, estamos en comunicación constante contigo como seguimiento.
Nada de travesuras de cachorro
En varios aspectos, un cachorro puede asemejarse a un@ niñ@: tiene mucha energía, le encanta jugar y en menos de lo que nos damos cuenta, ya está mordiendo o jaloneando algo. Un peludito adulto ya pasó por esa etapa y en la mayoría de los casos, tiene menos energía, por lo que requiere menos supervisión. Lo cual no quiere decir que pueda vivir confinado a un balcón, un patio, un cuarto o que no sea necesario sacarlo a pasear y jugar con él todos los días.
Necesitan menos supervisión
Al tener menor energía, su necesidad de aventurarse y curiosidad disminuye, por lo que puedes dejarlos más tiempo sin supervisión, aunque repetimos: no quiere decir que no requieran atención, solo que pueden comportarse mejor y no causar grandes desastres.
Control de esfínteres
Que un cachorro llegue a hacer sus necesidades en un lugar específico depende de la maduración de su control de esfínteres (algo que suele suceder a partir de los 5 o 6 meses), por lo que implica tiempo, paciencia y constancia, además de una mayor labor de limpieza.
Al adoptar a un perro o gato adulto puede entender mucho más fácilmente cuál es el lugar para hacerlas o lo hará cuando lo saques a pasear.
Demandan menos atención
Aunque necesitan paseos todos los días, en la mayoría de los casos pueden no requerir de tanta actividad física como un cachorro. Pero sin duda, los perros adultos, como los seres sintientes que son, tienen mucha ternura y cariño para ofrecerte.
Si ya te convenciste de adoptar a un perro adulto, conoce a nuestros peluditos en busca de un hogar amoroso y responsable en nuestro Centro Médico Veterinario: Av.Chapultepec #238, col. Roma, de lunes a domingo de 10 am a 5 pm. O escríbenos por Whatsapp al 55 5929 9213.
También puedes visitar nuestros puntos de adopción en Petco Miramontes (Av. Canal de Miramontes #2600) y Petco Miyana (Av. Ejército Nacional #769). En cualquiera de ellos, de lunes a domingo, de 10 am a 7 pm.